¿EXISTE UN PROYECTO SECRETO PARA CREAR BOLAS DE PLASMA QUE "HABLAN"?

El periodista David Hambling ha escrito un artículo titulado  «UFOs, Plasma Lasers, And The Pentagon’s ‘Voice Of God’ Weapon» (06/06/2021) donde expone la existencia de un programa secreto desarrollado por la Marina estadounidense para crear bolas de plasmas con oscuros fines. Según especula Hambling estas pruebas podrían tener relación con los denominados OVNIS del Pentágono y con algunas perturbadoras experiencias de control mental: «Como ya informó la revista Forbes, la Armada de los Estados Unidos está estudiando la posibilidad de utilizar pulsos de láser ultracortos, que crean un plasma brillante en el aire para alejar los misiles de los aviones. Esto podría explicar algunos de los "OVNIS" descritos en el reciente informe del Pentágono sobre Fenómenos Aéreos Inexplicables. Resulta que el interés por esta tecnología se remonta a mucho más atrás de lo que se cree, y no sólo en los Estados Unidos. Ya en 1966, los especialistas trataban de dar sentido a los OVNIS en un informe anterior, el Proyecto Libro Azul de las Fuerzas Aéreas. Al igual que la versión moderna, este informe concluía que no había pruebas de que los OVNIS fueran naves extraterrestres, pero era más escaso en explicaciones. Philip Klass, editor de la revista Aviation Week y notable escéptico en materia OVNI, escribió su análisis con la perspectiva añadida de una experiencia en efectos eléctricos. Llegó a la conclusión de que algunos OVNIS eran "plasmas luminosos de aire ionizado, una forma especial de "rayo en bola" generada por la corona eléctrica que se produce en las líneas de alta tensión bajo ciertas condiciones."

Los rayos en bola pueden producirse de forma natural durante las tormentas eléctricas o a partir de cortocircuitos en los equipos eléctricos de alta tensión, un primo poco conocido del más conocido es el fuego de San Telmo, que ilumina los mástiles y las antenas antes de una tormenta. Klass, experto en guerra electrónica, apreciaba claramente el potencial de este efecto para sembrar la confusión entre los observadores, aunque la tecnología para crear tales efectos a voluntad no existía en ese momento. (Se desconoce si los misteriosos Foo Fighters -bolas de luz brillantes vistas por las tripulaciones de los bombarderos aliados en la Segunda Guerra Mundial- eran un arma secreta, un fenómeno natural o una información errónea).

Los modernos láseres de pulso ultracorto proporcionan un medio fiable para crear plasma a distancia. La duración de los pulsos se mide en femtosegundos, es decir, entre 10 y 15 millonésimas de segundo. En 2005, dos investigadores que trabajaban para el gigante francés de la defensa THALES publicaron un artículo en el que analizaban el potencial de este efecto para la defensa antimisiles, en particular para contrarrestar los misiles que buscan calor. Además de otras posibilidades, sugirieron "un plasma que puede utilizarse como señuelo activo contra la electrónica de localización por infrarrojos", al igual reflejó el trabajo de la Marina estadounidense de 2018.

THALES es un líder mundial en láseres de pulso corto. El Curiosity Rover de la NASA utiliza un láser THALES para excavar rocas con plasma y analizar su composición química a partir de la luz que producen. Pero mientras hablan libremente de los usos científicos y comerciales, la página web del láser THALES, no menciona las aplicaciones militares. Tal vez no se haya perseguido la idea, o no se quiera hablar de ella. Un documento chino de 2010 sobre las aplicaciones del láser de femtosegundos a las contramedidas EO también discute el potencial de los láseres de pulso corto para entorpecer la guía de misiles, pero no parece haber ningún otro documento chino de código abierto sobre este tema. Una vez más, puede que se trate de una idea descabellada que no llegó a ninguna parte, o puede que la investigación no se lleve a cabo de forma transparente.

Una de las historias más interesantes en este campo fue el rumor que escuchó el periodista de “New Scientist” Justin Mullins sobre una nueva y extraña arma que supuestamente se estaba desarrollando en el desierto de Nuevo México en la década de 1980. Se llamaba la Voz de Dios: "Los investigadores que trabajaban con armas láser de alta potencia descubrieron que podían crear una bola de fuego brillante en el cielo cruzando los haces de dos potentes láseres infrarrojos. Los haces eran invisibles a simple vista, pero donde se cruzaban, sus campos eléctricos se volvían tan intensos que desgarraban las moléculas del aire, creando un plasma… Moviendo los rayos láser por el cielo, los investigadores descubrieron que podían desplazar la bola de plasma de un lado a otro a gran velocidad", escribió Mullins en 2000. Hasta aquí todo muy extraño. Pero lo que resulta más sorprendente es que, al pulsar los láseres, podían modular el sonido crepitante producido por el plasma para transmitir un mensaje coherente: en efecto, una bola de fuego parlante. La idea era que el dispositivo se utilizara para operaciones psicológicas, con una voz aparentemente divina que ordenara a los oponentes huir o rendirse. Mullins nunca consiguió averiguar si había algo de verdad detrás de los rumores de la existencia de estos experimentos. Hablando con varios científicos llegó a la conclusión de que la Voz de Dios sería "posible en el laboratorio pero muy difícil de producir en el cielo".

Evidentemente tomada por sí sola suena como una historia fantástica y sin fundamento. Pero sin embargo, en 2018 el Programa Conjunto de Armas No Letales del Pentágono publicó un vídeo de un láser de pulso corto que creaba una bola de fuego de plasma real que hablaba y transmitía un discurso apenas comprensible: "la cosa más espeluznante que oirás en toda la semana", según Popular Mechanics. Aunque esto no confirma que los científicos estuvieran jugando con bolas de fuego láser en el cielo en los años 80, sugiere que el proyecto de la Voz de Dios no era una completa fantasía. Algún día, un plasma brillante que se desplaza por encima de nuestras cabezas puede ser tan poco llamativo como un letrero de neón, y probablemente anunciará las mismas cosas a mayor escala. Pero mientras tanto, esta tecnología parece que puede dar lugar a informes sobre OVNIS y los que más saben sobre esto están informando muy poco».

JOSE ANTONIO CARAV@CA

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